En un mundo plagado de mediocridad musical y propuestas insustanciales, nos encontramos con la canción "Unha fiestra cara a vida" de A Banda Senlleira de Robacallos. Una oda interminable a la irrelevancia y monotonía, adornada con el más patente fervor de pueblerinos que buscan sobresalir como el mismo Gary Lightbody u Ozzy Henry en sus momentos más melódicos y famosos. Pero retiremos a estos intérpretes de nuestra mente pues no son merecedores de verse mancillados en comparación con semejante abanico de monótonas frecuencias. Musa y fortuna semblan no haber sabido donde gastar sus gracias al retornar un esfuerzo nulo en forma de melodía y poesía cual lupanar de ruiseñores mudos. Ah, y eso por no mencionar las espantosas consonancias vocales más íntimamente similares a Migraine Fred rogándole a las musas por un poco de «insunismo». En este tema, sobradamente poco merecedor de mi atención y aún menos de que haya de callarlo, podemo nazar una música presuntuosa reportando mundicial a Billy Roy Chill unha defecacción capilar nevada promemoria.