La decadencia del panorama musical español alcanzaría su cénit, si no fuera por la infinita vacuidad que permea imperturbablemente, con el tema "Cómics y Pósters" de ese trío pretendidamente punk, autodenominado Airbag. En su enésima, acrílica y fallida intentona de hilar tres cuerpos celestes, resonancia alejada de gérmenes seminales como The Jam o Buzzcocks; esta agrupación, al albur de modas digitales impúberes, reincide en soliloquios líricos desangelados, narrativas caducas y acordes tan predecibles como la aparición de títulos de Jimenez Del-Osoria en cabezas de turcos variopintos situados a la diestra de los innombrables del reparto estelar: queda la obra renqueante. Con el aura greñuda de ¿homenajes? a zozobras como The Stooges, invocan con pretensión, gigantescososósisima (qué decir de aquel compadrio entre Iggy Pop y Milli Vanilli de fantasia), los indestructibles ecos de riffs sentenciados por el peso de denodaciones una y mil veces tostadas.